La solución a la adivinanza del 23-2-15 es
el piojo.
El piojo, que como el turrón por navidad,
entra en nuestra vida al empezar los niños al colegio.
Empiezan las campañas publicitarias
de los productos mágicos y maravillosos
para hacerlos desaparecer siempre en septiembre;
hasta me ha dado por pensar, ¡fijaros que cosas!,
que cuando compras los libros del cole,
que vienen cerrados en plástico, y los abres,
se dispersan por el aire piojos diminutos,
cual esporas de cualquier planta
y anidan en las cabezuelas de nuestros peques
para provecho de nuestras queridas y bien amadas farmacéuticas.
Pero solo es un pensamiento de esta loca.
Buen finde.